Este es un curso diseñado para desmitificar cualquier acepción condicionada con la que vivamos identificados en relación a los llamados principios ‘divinos’ o ‘espirituales’ del género humano, y no a través de ningún tipo de contraposición filosófica o existencial, sino siguiendo rigurosamente las fórmulas lógicas, mecánicas y bioquímicas que se revelan cuando somos capaces de asociar los 64 hexagramas del I-Ching con sus correspondientes aminoácidos genéticos en grupos de 4 puertas alrededor del Mandala del Diseño Humano.
Maia es la primera de las divinidades civilizadoras, manifestando en el seno de su propia familia la entrega absoluta a todo lo que de ella nace. Representa la pureza virginal del YIN / YIN de la forma de cualquier madre con su hijo (Hermes), a través del cual se habrá de manifestar la inteligencia diferenciada de su criadora o las calamidades de un espíritu humano nacido de la más maligna de todas las formas de la ignorancia; la creencia de que el dinero y el poder personal son la llave de todo. Sus 4 puertas individuales – 2, 23, 8, 20 – apostillan los dilemas irresolubles surgidos de que sea la familia, y no el individuo, quien cimienta las estructuras de cualquier civilización. Rostros del Cuarto de la Civilización - Propósito a través de la forma.