Abrazando la Vida como un Ser Emocional Todo lo humano comienza y termina con el sistema emocional. No es casualidad que represente la fuente de autoridad interna para la mitad de la humanidad. La combinación de energía nerviosa y potencial inteligencia neuronal convierte al Plexo Solar humano en el más inusual de los 9 centros del Gráfico Corporal Rave. No es fácil de comprender, a menos que se haya acumulado un cierto nivel de experiencia personal como base, pero aquí hay información relevante que puede servir como fundamento para entender su trascendental importancia en la manifestación única del espíritu humano en la vida cotidiana a través de cada forma individual. Ra explicaba cómo hace aproximadamente 90,000 a 100,000 años ocurrió una mutación en la laringe humana, permitiendo a Homo Sapiens articular sonidos y dar vida a la famosa frase: "En el principio fue la palabra". Esta mutación se produjo a través de la polaridad de los portales 12 y 11. El portal 12, ubicado en el centro de la Garganta, mira directamente al portal 22 en el Plexo Solar, a través del Canal de la Apertura – el diseño de un ser (anti)social – creando la definición más arquetípica en el tipo Manifestador, que se convertiría en el iniciador y creador del espíritu de todas las civilizaciones humanas tal como han evolucionado hasta hoy. Su polaridad, el Portal 11, llamado "Paz", está ubicado en el Canal de la Curiosidad dentro del centro Ajna, portando el diseño de un Buscador. Juntos forman uno de los dos ejes de la llamada Cruz de Ángulo Derecho de Edén, mientras que el segundo eje está compuesto por los portales 6 y 36. Estos dos portales emocionales son responsables de procesar y regular la fertilidad y el poder creativo del Plexo Solar humano. Aquí comienza la búsqueda de "La Tierra Prometida", "El Paraíso Perdido", "La Utopía" y otros paisajes idealizados que han impulsado el desarrollo de la inteligencia estratégica en Homo Sapiens, siempre buscando lo que no está allí. Paradójicamente, al perseguir continuamente su inocencia perdida, la inteligencia de Homo Sapiens se volvió cada vez más estratégica en desarrollar el poder agresivo y potencialmente destructivo del "Mono Asesino", como lo llamaba Ra. No hay duda de que, en términos de matar, ninguna otra especie puede siquiera compararse con nosotros. Durante mis viajes a Poona, India, mientras exploraba mi propia sombra alrededor de mi primer retorno de Saturno, recuerdo que el Plexo Solar se asociaba con lo que se conoce como el tercer chakra, y su tema fundamental era el "Poder". Sin embargo, este "Poder" no se refería a la fuente de energía pura que encontramos en el centro Sacral, sino al poder social de las emociones para manifestarse agresivamente (de manera activa o pasiva) en todos los Homo Sapiens, cegándonos ante nuestra propia vulnerabilidad y tratando de neutralizar o ignorar nuestros miedos a través de la manifestación catártica de la determinación de protegernos o destruir aquello que tememos. Este poder llevó al "Mono Asesino" a la cima de la cadena alimenticia. El año 1781, paralelo al descubrimiento de Urano por Herschel, marcó el comienzo de una nueva era con la revolución industrial, trayendo consigo la revolución sexual, como consecuencia del acceso de las mujeres al mercado laboral y a su propio salario. Desde entonces, las tasas de divorcio no han dejado de crecer. En esencia, todas las revoluciones manifestadas después de 1781 actuaron como agentes sociales que prepararon el terreno cognitivo para la mutación del Plexo Solar humano y la emergencia de lo que se conoce como "inteligencia emocional". Hoy vivimos tiempos confusos, atrapados entre los valores obsoletos heredados del mundo de 7 centros, que se desmoronan ante nuestros ojos, y una nueva gama de experiencias vitales y sociales que impactan profundamente nuestra psicología individual. Aquellos valores antiguos, arraigados en tabúes sexuales y creencias supersticiosas, ya no bastan para ayudarnos a integrar estas nuevas experiencias emocionales y sexuales que desafían los paradigmas morales antiguos. El impacto más evidente de esta mutación se observa en el colapso de las estructuras sociales, particularmente en la institución moral más tradicional: el vínculo familiar. Desde una perspectiva individual, esta mutación puede ser una maravillosa oportunidad para liberarnos de los condicionamientos del pasado y expandir nuestra conciencia individual, descubriendo el potencial de los 9 centros para valorar la experiencia personal desde un lugar completamente nuevo. Mientras los Homo Sapiens de 7 centros experimentaban las emociones como una expresión de su vida social, los humanos de 9 centros las vivimos como un camino de "iniciación" hacia el valor de nuestra existencia individual. Este programa está diseñado para ayudar a quienes tienen definición emocional o fuertes activaciones en el Plexo Solar a reconocer esta predisposición y aprender a navegar sus olas emocionales como una forma de empoderar su firma personal. A través de una serie de conferencias, desglosaré la naturaleza mecánica del Plexo Solar y mostraré cómo este centro encarna las fuerzas evolutivas que han impulsado el desarrollo cognitivo estratégico de nuestra especie y cómo, en estos tiempos de mutación, nos lleva de vuelta al lugar donde siempre ha residido el verdadero espíritu humano.